La finalidad, caminar hacia una sociedad libre y justa desde la contracultura, la autogestión y la rebeldía. EL LOKAL, dentro de nuestras posibilidades y deseos, entendemos que debe ponerse al servicio de las luchas que se originan tanto en el barrio, como en el resto de la ciudad, y el mundo.
08 Violencia y muerte de Juan Andrés Benítez. En el Raval de Barcelona en 2013 has been added to your wishlist
Cosas que tal vez halles ocultas en mi oído. Poemas desde Gaza has been added to your wishlist
Los colectivos de solidaridad. Una experiencia de lucha en París (2001-2003) has been added to your wishlist
Venezuela crónica. Cómo fue que la historia nos trajo hasta aquí has been added to your wishlist
Sense connexió has been added to your wishlist
06 La revuelta de las mujeres. Barcelona 1918 has been added to your wishlist
Caliban i la bruixa has been added to your wishlist
Obediencia a la autoridad has been added to your wishlist
Sorollada has been added to your wishlist
Hazlo tu mism@. Recupera tu vida has been added to your wishlist
LP Bailando a la muerte. TRANSMISIÓN N has been added to your wishlist
LP Blau sang, vermell cel. CRIM has been added to your wishlist
Poeta Muerta has been added to your wishlist
Tras las huellas de una vida generosa. Aurelio Fernández Sánchez y los solidarios has been added to your wishlist
LP Solución hidroalcólica. KASPARRATA has been added to your wishlist
1968 cuando se marchitó el rojo de las banderas has been added to your wishlist
Mujeres y locura has been added to your wishlist
K7 Último aviso recopilatorio. VARIOS has been added to your wishlist
Otoño alemán
En 1946, el periódico sueco Expressen envió a ese gran «cementerio bombardeado» que era la Alemania de posguerra a Stig Dagerman —un autor de sensibilidad anarquista que, pese a contar solo veintitrés años, ya gozaba de cierto prestigio literario, pues había publicado las que serían sus dos novelas más importantes, La serpiente y La isla de los condenados— para que escribiera una serie de reportajes que todavía hoy están considerados como toda una lección de periodismo literario. Y es que, mientras los diarios del mundo entero ofrecían el retrato maniqueo de un país al que se le exigía una abjuración desmedida, Dagerman, un narrador dotado de una delicadeza extraordinaria y libre de cualquier tipo de prejuicio, prefirió observar y escuchar, cruzar el país en trenes abarrotados, visitar sótanos inundados y urinarios reconvertidos en el miserable «hogar» de muchas familias, recorrer las ruinas de ciudades como Hamburgo, Berlín, Múnich o Colonia, o asistir al ridículo espectáculo de los procesos de desnazificación para contar el sufrimiento de los vencidos. El inconmensurable talento de Dagerman, su palpable humanidad convierten Otoño alemán en un testimonio complejo e inestimable de la deplorable situación de un pueblo desnortado y empobrecido, en una honda meditación sobre el odio y la culpa, y en una denuncia del hipócrita discurso de los aliados.
Stig Dagerman fue el niño prodigio de las letras escandinavas. Nacido en Älvkarleby (cerca de Estocolmo) en 1923, frecuentó los ambientes anarquistas suecos y se convirtió en un habitual de sus publicaciones. Entre 1945 y 1949, de los veintiuno a los veintiséis años, escribió toda su obra: cuatro novelas, cuatro obras de teatro, un volumen de novelas cortas, cuentos, ensayos y poemas.
Ressenyes
Encara no hi ha ressenyes.